Qué hacer en Fez, Marruecos

Mística y mágica, Fez es una ciudad excepcional de Marruecos, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y sede de la mayor y más antigua medina del Norte de África. La ciudad fue en su día la capital de Marruecos y sigue considerándose el epicentro cultural del país. Explore las murallas medievales de la maravillosamente caótica medina y descubra torres de especias, artesanía tradicional, hammams y curtidurías. El pasado está vivo aquí, así que tómese uno o dos días para disfrutar de las mejores cosas que hacer en Fez. Qué hacer en Fez, Marruecos

Piérdase por la medina de Fez

La medina de Fez (Fez el Bali) es la más antigua y grande del norte de África, ¡data del siglo IX! También está declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO debido a su importancia histórica y cultural. Es fácil entender por qué al ver lo bien que se ha conservado el antiguo encanto de la medina. Descubra las raíces de Fez paseando por sus miles de callejuelas y disfrute de la mayor zona urbana sin coches del mundo.

Debido a la estrechez de sus calles, es muy fácil perderse, como nos ocurrió a nosotros un par de veces. Asegúrese de saber qué señales seguir antes de salir de su riad u hotel, ya que incluso Google Maps puede tener dificultades para orientarse en este laberinto.

Si es posible, hay que elegir un hotel dentro de la medina. Esto se debe a que algunas de las puertas de acceso a la medina cierran después de las 19.00 horas. Esto puede causar problemas si se desea regresar a un hotel fuera de las murallas de la medina.

Estos son todos los riads de la ciudad de Fez

Consejo: ¿Se ha perdido? Pregunte a los tenderos o dueños de restaurantes cómo llegar a su destino. Tenga cuidado con las estafas en las que los niños le ayudan con las indicaciones a cambio de dinero al final.

Jardines de Jnan Sbil (Bou Jeloud)

ste tranquilo rincón de naturaleza es el único jardín público de la bulliciosa medina. Entre para descansar del ajetreo y disfrute de los bellos juegos de agua, pájaros, plantas, flores y paseos bordeados de palmeras. Relájese, refrésquese y observe cómo los habitantes de Fez disfrutan también del parque.

Horario de apertura: De 8.00 a 19.30 h, de martes a domingo. Lunes – Cerrado

La mágica madraza de Bou Inania

La madrasa Bou Inania es un emblemático edificio religioso situado en el centro de la medina. Construida en el siglo XIV, fue una escuela. Hoy, su extraordinaria arquitectura está abierta al público. Explore su magnífico patio de mármol, sus intrincadas tallas de madera y sus interminables mosaicos de azulejos en varios tonos de verde. El tema del color continúa en la mezquita adyacente, con su impresionante minarete verde visible desde toda la medina. No cabe duda de que esta madrasa es la más magnífica de la ciudad. No se pierda esta magnífica visita a Fez.

Por su ubicación, es fácil visitarla mientras se pasea por la medina. También es uno de los pocos lugares religiosos de Fez que pueden visitar los no musulmanes. Visítelo a primera o última hora del día para ver este hermoso lugar en su momento más tranquilo. Nosotros lo visitamos sobre las 16:00 y casi no había nadie.

Horario de apertura: De 9.00 a 17.00 (excepto durante la oración)
Precio de la entrada: 20 Dhs

Disfrute de los olores de las curtidurías

No deje de visitar las mundialmente famosas curtidurías de Fez. Descubra cientos de fosas de barro llenas de tintes de diferentes colores utilizados para teñir pieles de animales. Las curtidurías son una parte única de la cultura de Fez y una de las mejores cosas que hacer en Fez. Pero le advertimos de que el olor es muy fuerte. Los lugareños intentarán ofrecerle “caramelos de menta gratis” para aliviar el olor, pero hemos visto a mucha gente pagar después. Así que es mejor acordarse de llevar mentas o un pañuelo.

Otra forma de ver las tenerías es buscar una terraza cercana. Así podrá subir a lo alto y disfrutar de una vista de pájaro.

Consejo: Visite la curtiduría Chouara, la más grande de la ciudad y la más antigua del mundo.

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La universidad más antigua de África: Kairaouine

Se dice que la mezquita de Kairaouine es la más antigua del mundo y la segunda más grande de Marruecos. Es uno de los edificios religiosos más importantes de Fez y, como tal, sólo los musulmanes pueden entrar. Aunque no se permite la entrada a turistas, se puede echar un vistazo a través de algunas de las puertas de entrada. Contemple el impresionante patio de mármol, las fuentes, los arcos, los azulejos y las tallas. No sólo eso, sino que podrá ver a muchas personas rezando en este edificio sagrado, que todavía se utiliza como universidad.

Consejo: intente divisar el hermoso minarete de la mezquita desde uno de los tejados cercanos.

Tomar un zumo de naranja natural

El zumo de naranja es algo que nos encanta, ¡y Fez lo hace muy bien! Cómprate uno fresco y barato todas las mañanas para empezar el día con buen pie. No puede perderse los puestos de zumo de naranja repartidos por todo el centro de la ciudad. Delicioso.

Madraza Al Atterine

Puede que esta madraza sea pequeña, pero su belleza es mucho mayor que su tamaño. Hay un maravilloso patio en el centro, rodeado de azulejos con motivos geométricos que decoran las paredes y el suelo. Maravíllese ante las intrincadas puertas de madera tallada, que le transportarán al Marruecos medieval. No olvide alzar la vista hacia el hermoso minarete. Este oasis de calma, en medio de la locura de Fez, se encuentra cerca de la mezquita Kairaouine y de la curtiduría de cuero Chouara. Si dispone de tiempo, ¡una visita obligada en Fez!

Horario de apertura: De 8.00 a 18.00 (compruebe siempre las fiestas y eventos religiosos, ya que pueden alterar los horarios)
Entrada: 20 Dhs (2 USD)

Puesta de sol en una azotea

La arquitectura marroquí se caracteriza por sus hermosas casas de color tierra y tejados planos. Es el paraíso de las terrazas. Una de las mejores formas de ver Fez es encontrar un buen café o bar en una azotea (como el Cafe Clock) y disfrutar de la ciudad desde arriba. Siéntese aquí al final de un día de turismo y contemple la puesta de sol tras esta hermosa ciudad. ¡Un placer!

El Palacio Real (Dar Al-Makhzen)

Contemple el deslumbrante exterior del Palacio Real. La familia real y el gobierno siguen utilizando este edificio con frecuencia, por lo que los turistas no pueden entrar. Sin embargo, las impresionantes paredes de azulejos de mosaico azul y las magníficas puertas de bronce lo convierten en uno de los principales lugares de interés de Fez. Los turistas también pueden pasear por los hermosos jardines verdes del palacio. Junto a los jardines se encuentra la gran mezquita de Fez el-Jdid, con el minarete más bellamente decorado.

Sugerencia: Visite Dar Batha, el antiguo palacio real de Fez, por su museo y sus tranquilos jardines.

Explorar los laberínticos zocos

Los zocos son el alma de cualquier ciudad marroquí, y los de Fez son algunos de los más impresionantes. Retroceda en el tiempo hasta la Edad Media en calles polvorientas y amuralladas donde los únicos medios de transporte son los burros y los carros. Es, sin duda, un asalto a los sentidos, con vendedores que gritan precios y gangas, olores aromáticos que llegan de todas direcciones y expositores textiles de todos los colores del arco iris. Las calles de los zocos de Fez son mucho más estrechas que las de Marrakech, con numerosos giros y bifurcaciones que las convierten en un auténtico laberinto.

Comprar una hermosa alfombra de Fez

Fez es famosa por su artesanía, especialmente por sus alfombras. Las principales calles de la medina están repletas de vendedores de alfombras, cada una de ellas con impresionantes diseños marroquíes. Una francesa que vive en Marrakech nos dijo que fuéramos a una tienda en particular (frente al Café El Khmissa), que le daría un precio honesto.

Después de ver unas 20 alfombras, elegimos nuestra favorita. La alfombra medía 2 metros de largo por 1,5 de ancho y pagamos 150 dólares, lo que nos pareció un precio justo por una alfombra tradicional marroquí.

Dónde alojarse en Fez

Aproveche la oportunidad de alojarse en un riad tradicional de Fez. Se trata de casas de huéspedes marroquíes, normalmente situadas en las zonas más antiguas de la ciudad y centradas en torno a patios o piscinas. Son un lugar estupendo para encontrar un poco de paz y tranquilidad al final de un ajetreado día en Fez. Lo ideal es elegir un hotel o riad en el centro de la medina para estar cerca de los principales lugares de interés y evitar perderse a altas horas de la noche.

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